En la primera gala de eliminación de Gran Hermano 2024, Delfina de Lellis quedó fuera del reality con el 58,9% de los votos, enfrentándose a Ulises Apostol en una ajustada definición. Sus comentarios transfóbicos hacia una compañera y episodios cuestionables, como escupir en el vaso de otra participante, generaron rechazo en redes sociales.
La salida de Delfina fue tensa, ya que optó por no hablar con el conductor Santiago del Moro, alegando sentirse "superada por la situación". Este episodio marca un inicio cargado de controversia para la edición actual del reality.