A finales de 2024, China enfrentó un aumento considerable en los casos de infecciones respiratorias agudas, con el HMPV (human metapneumovirus) como uno de los principales agentes identificados. Este virus pertenece a la familia Pneumoviridae y comparte características con el virus respiratorio sincicial (VRS). Afecta principalmente a niños pequeños, adultos mayores y personas inmunocomprometidas, generando desde síntomas leves como fiebre, tos y congestión nasal hasta cuadros más severos, como neumonía o bronquiolitis en grupos vulnerables.
En respuesta al brote, las autoridades sanitarias chinas implementaron un sistema piloto de monitoreo para neumonías de origen desconocido, buscando mejorar la detección temprana y la capacidad de respuesta ante enfermedades emergentes. Este incremento en casos, especialmente durante el invierno, generó presión sobre los hospitales, que reportaron una mayor afluencia de pacientes, particularmente niños menores de 14 años en provincias del norte del país.
Actualmente, no existe una vacuna ni un tratamiento antiviral específico para el HMPV. El manejo de los casos se centra en aliviar los síntomas mediante cuidados de apoyo. Ante la preocupación pública, expertos en salud destacaron que, aunque puede ser grave en ciertos casos, la mayoría de las personas infectadas se recupera sin complicaciones graves. Asimismo, hicieron un llamado a evitar el uso indiscriminado de medicamentos antivirales, ya que no son efectivos contra este virus.
Medidas preventivas
Para reducir la transmisión del HMPV, las autoridades y expertos recomiendan las siguientes prácticas:
- Lavado de manos frecuente: Usar agua y jabón durante al menos 20 segundos.
- Uso de desinfectantes: Soluciones a base de alcohol cuando no haya acceso a agua y jabón.
- Evitar el contacto cercano: Mantener distancia de personas enfermas y limitar la exposición a lugares concurridos.
- Cubrirse al toser o estornudar: Usar el codo o un pañuelo desechable para evitar la dispersión de gotas respiratorias.
- Higiene de superficies: Desinfectar regularmente objetos y superficies de uso común.
A pesar del impacto inicial, los especialistas insistieron en que mantener estas medidas y fortalecer la vigilancia epidemiológica ayudará a controlar la propagación del virus y proteger a los grupos más vulnerables.